Modelo de Gestión del Proceso Docente Educativo con un enfoque sistémico (página 2)
En eso radica verdaderamente el lugar privilegiado que
las Universidades ocupan en una sociedad en la
época actual; es ello lo que ha posibilitado su existencia
y desarrollo
durante 10 siglos, con independencia
de los importantes cambios sociales que en ese periodo han tenido
lugar en el mundo.
Para lograr llevar a vías de hecho esta misión, en
la Universidad se
estructuran diferentes procesos, que
en su integración dialéctica le dan su
personalidad
propia, por lo que una caracterización de la Universidad
pasa inevitablemente por la conceptualización de los
procesos que en ella se desarrollan.
Sin pretender agotar su diversidad, podemos afirmar que
una caracterización esencial puede lograrse a partir de
identificar tres procesos que son fundamentales en toda
Universidad moderna, a saber:
• Docente
• Investigativo
• Extensionista
Estos procesos, en tanto que procesos sociales,
adquieren significación plena cuando se estudian en su
interrelación, como elementos componentes de un sistema.
Así, cada uno de ellos, aunque revela de alguna manera un
elemento esencial que lo connota y distingue de los restantes,
manifiesta igualmente, rasgos, características, que son
propios de los restantes y en eso radica precisamente la tesis de que
conforman un sistema.
Así, el proceso
docente se estructura en
la Universidad con el propósito fundamental de preservar
la cultura. Esa
es su especificidad; y a través del mismo las instituciones
de educación
superior garantizan que la cultura de la humanidad se
transfiera de generación en generación.
El proceso docente, en el cual incluimos no solo la
actividad de pregrado sino también la de postgrado, con
independencia de la forma externa, fenomenológica, en que
él se manifiesta a partir de las características
particulares que se establecen en un aula entre el profesor y los
estudiantes, expresa una profunda relación generacional
que connota su carácter social: La generación que
enseña transmite a la que aprende aquella parte de la
cultura de la humanidad que es necesario aprehender para lograr
los objetivos
propuestos.
La dirección ha tenido una importancia
esencial para coordinar los esfuerzos individuales en función
del logro de los objetivos de una organización ya sea de carácter
económico, educativo, social o de cualquier
tipo.
La actividad de dirección, surge desde que se
conformaron las primeras colectividades humanas, para alcanzar
metas que no se podían lograr individualmente. En sus
primeros momentos esta fue una actividad de cierta manera
empírica y espontánea, donde prevalecía la
experiencia de las personas más viejas y mejor preparadas,
sin embargo, en nuestros tiempos se ha ido desarrollando y
perfeccionando hasta adquirir un carácter
científico.
El enfoque básico que caracteriza a la escuela de la
dirección o administración
científica es el énfasis en las tareas, su
nombre tiene como origen la aplicación de los métodos de
diferentes ciencias a los
problemas de
la dirección y administración, para alcanzar una mayor
eficiencia.
Es bueno señalar el concepto de
gestión, para poder entender
los antecedentes del problema es:
Acción y efecto de integrar los procesos para
el desarrollo o evolución de una Organización o
Institución.
Algunos de los problemas que hoy tenemos presentes en la
SUM de Pinar del Río, son, entre otros.
- En ocasiones no se cumple con los principios de
la planeación (la racionalidad,
flexibilidad, la unidad y continuidad). - No todos los profesores parciales tienen suficiente
dominio de la
didáctica. - El chequeo y control de
lo que se orienta carece de sistematicidad, provocando
reiterados incumplimientos de los recursos
humanos por la falta de dominio de las estrategias, metas u objetivos que se
trazan. - No comprensión del modelo de
semipresencialidad en la Sede por parte de estudiantes y
profesores. - Necesidad de perfeccionar el trabajo
metodológico a nivel de disciplinas y
asignaturas.
CONCLUSIONES
Teniendo en cuenta las perspectivas de la Nueva
Universidad y los retos que esta impone urge la búsqueda
de alternativas que permitan la adecuación del modelo
pedagógico a las condiciones de la Universalización
en Cuba y que se
logre formar un profesional integral, para lo que se hace
necesario perfeccionar el Trabajo
Metodológico y que el proceso docente educativo preste
especial atención a las características del
proceso de formación y a los sujetos que en él
intervienen en la Sede Universitaria Municipal en cada uno de los
procesos, en busca de un eficiente modelo de gestión del
proceso docente educativo.
BIBLIOGRAFÍA
. MINISTERIO DE EDUCACION
SUPERIOR. Resolución 269/91 (Reglamento para el
Trabajo Docente y Metodológico en la
Educación Superior). Habana, 1991.
. HORRUITINER SILVA, PEDRO. Principios de la
Planificación del Proceso Docente.
Revista
Cubana de Educación Superior. (Vol.3;
No.1).1979.
. ÁLVAREZ ZAYAS, CARLOS. Fundamentos
teóricos de la dirección del proceso docente
educativo en la Educación Superior Cubana. ( Tesis de
Doctorado ), Habana, 1989
. Álvarez de Zayas Carlos M. (1995). La
escuela de excelencia. Monografía. Dirección de
Formación de Profesionales, Ministerio de Educación
Superior de Cuba. La Habana.
. Betancourt Villalba Amneris 2005. Modelo de
Gestión Pedagógica del Colectivo de Carera para los
cursos regulares diurnos en la UPR. Tesis presentada en
opción al grado científico de Doctora en Ciencias
Pedagógicas. CECES. Pinar del Río.
DATOS DEL AUTOR:
Carlos Álvarez Llera
Subdirector Docente de la Sede Universitaria Municipal
de Pinar del Río, Cuba.
Categoría docente: Instructor
Estudios realizados:
Maestrante en Ciencias de la
Educación
Licenciado en Educación Primaria
Curso de Didáctica y Pedagogía
Curso de Ingles
Curso de Computación
Fecha de realización: 7 de diciembre de
2006
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